Los hábitos son esas acciones que al repetirlas, se van convirtiendo en nuestra manera de hacer las cosas. Formar prácticas saludables desde la infancia es la mejor inversión en salud para toda la vida, así como aprendemos a caminar, hablar y hasta lavarnos los dientes o amarrarnos los cordones de los zapatos, ¿por qué no crear hábitos saludables como alimentarnos bien, hacer deporte o beber agua?
Los hábitos de vida y la forma como la sociedad ha cambiado por muchos factores, han hecho que también cambien los hábitos de alimentación y de actividad física. A menudo estamos culpando a la tecnología, la inseguridad que se vive en las calles, la falta de tiempo, los medios de transporte, la capacidad de compra de alimentos de todo tipo, redes sociales y al mundo globalizado, pero todo comienza desde el núcleo de nuestros hogares, ponemos excusas y culpamos al entorno sin darnos cuenta que el cambio está en nuestras manos.
Son algunas costumbres que los niños y adolescentes deben aprender para llevar una vida sana. No hay que esperar a que tengan problemas de salud o sobrepeso para establecer unos buenos hábitos de vida, la prevención es, sin duda, la mejor apuesta para el futuro. El juego y el deporte son, junto a una alimentación equilibrada y un ambiente de armonía, los pilares de una vida saludable, ¿y cómo logramos esto?
Primero, una alimentación variada que aporte todos los nutrientes que el cuerpo necesita para estar sanos. Aunque los niños y adolescentes tienen sus platos favoritos, es importante animarles pero sin obligarles a probar cosas nuevas, el secreto está en que nuestros platos incluyan muchos colores para evitar la monotonía. Debe comprender cinco porciones entre vegetales y frutas, de distintos colores, y con esto nos aseguramos de incluir las vitaminas y minerales que nuestro cuerpo necesita. Podemos preparar batidos de frutas o vegetales y añadirles yogurt natural o helados bajos en grasa para aumentar el sabor, preparar ensaladas que tengan colores vivos y añadirles frutas. Debemos consumir productos de origen animal bajos en grasa, cereales y harinas preferiblemente integrales que nos ayudan a mejorar nuestro tránsito intestinal, así como grasas y azúcares, estos en pequeñas porciones, para no excluir ninguno de los grupos de alimentos.
Se debe tener un horario regular de tiempos de comidas con porciones moderadas, y hacer 5 tiempos como mínimo durante el día, siendo el desayuno el más importante para mantenernos activos a lo largo del día. No debemos permitir que los niños y adolescentes salgan de la casa sin desayunar, es uno de los hábitos más importantes que se debe desarrollar desde la infancia, también comer despacio y masticar bien los alimentos, estas prácticas nos ayudarán a tener un adecuado peso y a mejorar el metabolismo. Se recomienda beber líquido todos los días, que 4 vasos sean agua pura y 4 de refrescos naturales con poco azúcar, con esto ayudamos a mejorar la absorción de nutrientes, limpiar el organismo y mantenernos hidratados.
Realizar al menos 30 minutos de actividad física todos los días es importante. En casa, con la familia podemos poner música y bailar, buscar en internet videos de rutinas de ejercicios y realizarlos todos juntos, hacer el jardín, lavar el carro en familia, además de beneficiar a nuestro organismo estamos estrechando los lazos familiares y dando el mejor ejemplo a los niños y adolescentes.
Compartir el desayuno y la cena en familia es un hábito excelente, comer en armonía, sin estrés, sin televisión u otros distractores donde se tome el tiempo para disfrutar del momento y conversar en familia, va a ayudar sin duda a que en la casa haya un ambiente tranquilo, necesario para disfrutar de un estado integral de salud.
No se debe dejar de lado el dormir lo suficiente, al menos 8 horas, se debe acostumbrar a los niños y adolescentes a no quedarse a altas horas de la noche viendo televisión o utilizando la computadora. Los padres también deben compartir este hábito para lograr que el cuerpo descanse de las actividades que realizamos durante todo del día.
La salud es integral, los hábitos saludables desde la infancia nos van a llevar a una vida saludable y plena, debemos inculcar estos hábitos para que permanezcan por el resto de la vida y así poder gozar de un excelente estado de salud, el cambio está en nuestras manos y las excusas no existen.
Autor: Nutricionista Diego Coto
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